El senador demócrata por New Jersey Robert Bob Menéndez (foto), responsable del hostigamiento y acoso a todos los regímenes populares, progresistas y de izquierda de América Latina y el Caribe durante las tres últimas décadas, se dispone a enfrentar a tribunal de Manhattan, acusado de enriquecimiento ilícito, recepción de soborno, tráfico de influencias y confabulación con un gobierno extranjero (Egipto) para posibilitar la exportación de armas. Las interacciones delictivas con el presidente egipcio Abdelfatah al Sisi fueron mediadas –según el Fiscal Federal de Nueva York Damian Williams– por el empresario Wael Hana, único exportador de carne halal estadounidense a Egipto.
Las imputaciones incluyen las evidencias de las requisas realizadas en la mansión del legislador donde se encontraron 480.000 dólares, tres kilos de lingotes de oro, valuados en 150.000 dólares, y un auto de lujo no consignado en las declaraciones impositivas del congresista, financiado por el empresario dominicano José Uribe, condenado por estafas ligadas a la comercialización de seguros. En la acusación impulsada por el Departamento de Estado se detallan los hechos de corrupción sucedidos entre 2018 y 2022, cuando Menéndez utilizó su influencia como presidente del Comité de Relaciones Exteriores de la Cámara de Senadores para “proteger y enriquecer a empresarios amigos y apoyar al gobierno egipcio”, recibiendo a cambio dinero, oro y prebendas de distinto tipo.
Al impulsar la venta de armas a El Cairo, el Departamento de Justicia considera que el legislador violó la Ley de Registro de Agentes Extranjeros y la normativa que prohíbe taxativamente a los legisladores promover transacciones comerciales con intereses foráneos. La acusación incluye como cómplice a la esposa del senador, Nadine Arslanian, quien motorizó mecanismos de extorción para impedir que se sustanciara el juicio penal en su contra. Otro de los cargos presentados por la fiscalía del distrito, relevado por el FBI y la División de Investigaciones Criminales del Servicio de Impuestos Internos (IRS) es el tráfico de influencias impulsado por Menéndez –ante del Departamento de Justicia– para proteger al empresario Fred Daibes, un desarrollador inmobiliario de Nueva Jersey acusado de fraude crediticio contra el Mariner’s Bank, por un monto cercano a los dos millones de dólares.
La acusación describe el intento por promover la designación de su recaudador de fondos y letrado personal, Philip Sellinger, como fiscal federal de Nueva York, el procurador encargado de investigar las acciones más relevantes de la mafia y los casos de corrupción política. El Departamento de Justicia atribuye a Menéndez la intención de proteger a Daibes mediante la designación de Sellinger, con el objeto de garantizar la continuidad del lucrativo negocio de los bienes raíces desarrollados Edgewater, frente a Nueva York, por el que Menéndez obtenía beneficios indirectos. En total, la Unidad de Integridad Pública presentó 18 cargos en su contra, algunos de los cuales son penados hasta con 15 años de prisión.
El Centro de Estudios Legales y Políticos, institución dedicado al relevamiento de las irregularidades y los delitos de funcionarios y legisladores estadounidenses exigió en octubre la destitución del congresista por los 18 cargos y por los antecedentes de fraude previos. En dicha investigación realizada entre 2015 y 2017 el Departamento de Justicia consignó que Menéndez recibió alrededor millón de dólares del oftalmólogo Salomon Melgen para protegerlo de las pesquisas realizadas por la justicia. En esa oportunidad, además, el senador fue investigado por el tráfico de influencias en favor de dos banqueros ecuatorianos, los hermanos William y Roberto Isaías. Por esas asistencias políticas, Menéndez recibió 300 mil dólares que debió compartir con otros legislador conocido por sus posición anti cubana, el republicano Marco Rubio. Estas causas fueron llevadas a juicio en 2017 pero Menéndez y Rubio fue beneficiados por el entonces presidente Donald Trump quien le solicitó al juez del caso para que retirara todos los cargos.
Luego de las reciente acusaciones informadas el último 12 de octubre Menéndez se vio en la obligación de renunciar a la presidencia del influyente Comité de Relaciones Exteriores del Senado. Sin embargo se ha negado a abandonar su banca pese a la exigencia de sus colegas demócratas de ambas cámaras. Menéndez es congresista desde hace 30 años y su más principal aportante de campaña es el fondo buitre NML liderado por Paul Singer, uno d ellos responsable de la sustracción de 15 mil millones de dólares a la Argentina. En el estudio letrado que defiende a NML se desempeñó su hijo Robert Jacobsen Menéndez Jr. antes de ser electo como legislador en el Capitolio desde 2023. Según el presidetne del Centro de Estudios Legales y Políticos las acusaciones contra Menéndez demuestra que “no es sólo un político de carrera sino también un criminal de carrera”.
Fuente: Página 12