Los familiares de los reservistas movilizados por el ejército ruso denunciaron que los oficiales obligan a combatir a los heridos en un intento de conquistar la estratégica ciudad de Avdivka (Donetsk) antes de que termine el año.
«El 25 de noviembre les llegó otra orden para que los heridos leves y de mediana gravedad fueran atendidos ya en las trincheras. De los milicianos de la república popular de Donetsk ni siquiera se apiadan. Recogen lo que queda de ellos y de nuevo al asalto», señaló una de las esposas al portal Vazhnie Istorii.
Carta a Putin
En la carta firmada por más de cien personas que enviaron al presidente ruso, Vladímir Putin, aseguran que los soldados llevan diez meses en primera línea, a apenas 700 metros de Avdivka, bajo control ucraniano desde 2014. Los familiares afirman que, desde noviembre, los heridos participan en los asaltos en un intento de que la ciudad caiga en sus manos antes de que Putin participe el 14 de diciembre en su conferencia de prensa anual.
Los familiares de los militares del distrito militar occidental señalan: «Necesitan algún tipo de resultado. Todos dicen que tomamos Avdivka y después habrá negociaciones» de paz. «Le decimos a Putin que cuente el personal. Cuántos quedan realmente, no según los carnés militares, sino lo que aparece en los informes. Mi marido dice que allí se tropiezan con los cadáveres, que está lleno de ellos», afirmó.
Los soldados desplegados en esa zona tienen una media de 40 años y no disfrutan de vacaciones desde el comienzo de su movilización decretada por Putin en septiembre de 2022, según denuncian.
Buscan una victoria antes del invierno
El ejército ruso inició hace dos meses la contraofensiva para tomar Avdivka, ciudad a menos de 20 kilómetros de Donetsk, capital de la región homónima. Recientemente, las esposas y los familiares de los reservistas rusos movilizados en septiembre de 2022 publicaron un duro manifiesto con una petición para exigir al presidente el inmediato fin de la movilización indefinida.
«Recordamos cómo el presidente prometió que los reservistas no serían llamados a filas, que las misiones de la operación militar especial las cumplirían solo los voluntarios profesionales. Y, después, nuestros amados fueron enviados a Ucrania. Las promesas, de hecho, resultaron vacías», señala.
Entre otras demandas, exigen llenar el vacío jurídico existente al establecer «un plazo límite de servicio en caso de movilización parcial. No más de un año desde el momento de su leva». El jefe del comité de Defensa de la Duma, Andréi Kartapólov, aseguró que los movilizados solo regresarán a sus hogares «después de que concluya la operación militar especial».
Fuente: Página 12