El alcalde chileno, Javiera Reyes, el precandidato presidencial Daniel Jadue y el Constituyente Brbara Seplveda
Las elecciones chilenas del fin de semana pasado dejaron, entre otras sorpresas, la conformacin de un robusto bloque de 48 convencionales inscriptos bajo la etiqueta de «independientes», y el interrogante acerca de quines son, qu iniciativas impulsarn, cules intentarn neutralizar y en qu temas se centrarn con miras a la futura «ley de leyes» del pas.
Nos son preguntas de fcil respuesta en un proceso incipiente y cuyos efectos polticos se siguen desarrollando a toda velocidad en el pas vecino, pero todo apunta a que en un marco de creciente descrdito de los partidos tradicionales, el peso especfico del bloque en el debate constitucional ser crucial.
La complejidad para preverel rumbo del bloque de 48 convencionales independientesse relaciona tambin con suheterogeneidad”
Los comicios tambin definieron gobernadores, alcaldes, concejales y se tradujeron en una catarata de enroques y renuncias de cara a las candidaturas presidenciales, pero la definicin del rgano colegiado paritario que escribir la nueva Carta Magna es el que concentra el inters pblico porque all se juegan a partir de ahora algunas de las bazas ms importantes del futuro ajedrez poltico chileno.
La complejidad para prever el rumbo del bloque de 48 convencionales independientes se relaciona tambin con su heterogeneidad ya que la denominacin «independiente» incluye a quienes se inscribieron bajo ese tem, pero dentro de un pacto y al alero (no orgnico) de un partido poltico, algo comn en la conformacin de listas parlamentarias chilenas.
Ejemplo de lo anterior es que entre los «independientes» se cuentan tambin personas de manifiesta cercana partidaria, como Marcela Cubillos, exministra de Educacin y de Ambiente del presidente Sebastin Piera, o el connotado abogado Fernando Atria, un independiente que logr su escao con un cupo de la fuerza de izquierda Revolucin Democrtica (RD).
Lista del Pueblo, el «sub-bloque» mayoritario
An as y pese a estadiversidad ideolgica del bloque, los discursos de algunos de ellos, sus plataformas y campaas permiten inferir algunas posibles tendencias.
Dentro del bloque se destaca un «sub-bloque» mayoritario denominado la «Lista del pueblo», que con 27 convencionales asoma como protagonista en la inminente pulseada por la redaccin de la nueva Carta Magna.
Su lista de representantes, compuesta principalmente por liderazgos surgidos al alero del estallido social y que no sintonizan con la poltica tradicional, logr imponerse a pesar del magro financiamiento que obtuvieron en comparacin con sus contendores, como seala el Centro de Investigacin Periodstica chileno (Ciper).
Segn su programa, la «Lista del Pueblo» propone «una visin ecologista del desarrollo econmico y territorial que nos permite transitar a la superacin del extractivismo, con una mirada de respeto hacia los seres vivos no humanos, teniendo como punto de inflexin el calentamiento global, que implica realizar los cambios profundos de cmo nos relacionamos con la madre tierra».
El escrutinio puso a la Lista del Pueblo como la tercera fuerza poltica con ms representantes dentro de la Convencin Constituyente, detrs del pacto del oficialismo «Vamos por Chile» (37) y «Apruebo Dignidad» (28) que nucle comunistas (PC) y frenteamplistas (FA).
Uno de los fundadores de la «Lista del Pueblo», Rafael Montecinos, seal esta semana que el grupo «nunca va a conversar con la derecha» porque la fuerza tendr como interlocutores «las personas y no con los partidos».
Otra de las figuras prominentes de esta lista, Giovanna Grandn (conocida como «ta Pikachu») subray el rol fiscalizador que el colectivo tendr sobre el comportamiento de los representantes de otros grupos de izquierda.
La diputada Camila Vallejo, la concejala electa de Santiago, Virginia Palma (d.) Y la constituyente electa Valentina
Cambios radicales
Sin embargo, ms all de eventuales fiscalizaciones, otra cuenta posible de realizar es que del total de 155 constituyentes electos al menos 77 provienen de colectivos que, con vnculos orgnicos o no, impulsan cambios radicales al sistema.
En otras palabras, menos de los dos tercios que se necesitan para aprobar los cambios en la nueva Constitucin, pero mucha ms del tercio necesario para vetar las modificaciones que no los convenzan.
Un posible anlisis es proyectar un eventual polo de fuerza compuesto, adems de por los 27 convencionales de la «Lista del pueblo», por 7 independientes de listas locales, a los que se sumaran 28 del pacto Apruebo Dignidad (FA y PC) y 15 de los pueblos originarios (cupo que en total otorg 17 escaos).
Segn indica Ciper, estos 77 responden a colectivos que impulsarn el fin del rol subsidiario del Estado a los sectores econmicos concentrados y buscarn cambiar la economa extractivista, incorporar una mirada feminista y definir al pas como plurinacional, consagrar ms derechos laborales, una educacin pblica de calidad y gratuita y pulverizar el criticado sistema jubilatorio.
Todas estas demandas fueron las que gatillaron multitudinarias protestas en Chile en las ltimas dcadas.
Del total de 155 constituyentes electos al menos 77 provienen de colectivos que, con vnculos orgnicos o no, impulsan cambios radicales al sistema.
Negociaciones y pactos
De cualquier modo, la dispersin, tanto poltica como social y profesional entre quienes integran la Convencin Constituyente, obligar a arduas negociaciones, pactos y concesiones para arribar a acuerdos macro.
No ser fcil en un pas que en los ltimos aos alcanz preocupantes niveles de polarizacin poltica.
An as, neutralizado el objetivo de la derecha de bloquear toda iniciativa que se alejara del espritu de la Carta Magna actual -escrita durante la dictadura de Augusto Pinochet- y tras el remezn propinado a las fuerzas polticas tradicionales, estos sectores tienen despejado el camino para que la nueva Constitucin recoja las demandas expresadas en los ltimos aos en las calles, especialmente en octubre de 2019, cuando millones de chilenos reclamaron cambios de fondo.
Fuente: Télam